"Era la hora entre las luces.
Ese momento
de acantilado encanto
donde todo puede suceder.
Éramos. Estábamos.
Alguien tenía que ejercer
el derecho al beso,
al acto de quererse
tan eternamente
como posibilita
el tiempo.
Sucedió sin excepciones.
Me besó
y el amor quedó colgado
de la aquel instante
donde casi siempre
terminan todos mis sueños"
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