Muerto



"He lapidado mi alma
con la constante ebullición
de tu recuerdo.
Fuimos -seguramente-
corazones enfermos
de AMOR.
Que murieron.
Enfermos.

Co(n)razones,
muertos.

Yo necesitaba volar,
escapar de aquel absurdo letargo
en el que -a veces- te sume
la contratación sentimental.

Yo no puedo hipotecar mi vida.
Tampoco acelerar mi muerte.
Y mucho menos, tasar mi cariño
para que la balanza te demuestre
que sigue vivo nuestro amor,
cuando tú y yo sabemos
que ya nada es posible"

No hay comentarios: