La ranita de latón
Allí estaba ella, con su uniforme de latón, escondida entre los cd´s de aquel coche azul metalizado.
Era demasiado bonita para estar allí, seguramente alguien la habría olvidado así que la cogí y me la lleve conmigo.
Era una rana de latón, de esas a las que les das cuerda y saltan. Aquella sin embargo no lo hacía, estaba estropeada o quizás cansada de tanto saltar para hacer las delicias de muchos.
Tal vez por eso decidieron abandonarla ó simplemente la dejaron allí olvidada.
Ayer, mientras pintaba, un sonido "latónico" captó mi atención. Giré la cabeza para buscarlo y me encontré a mi primo Mario sonriente, jugando con la rana que saltaba airosa mientras yo la observaba.
¿Será que los juguetes sólo cobran vida cuando están con los niños ó que los niños son tan inteligentes que son capaces de hacer magia con los juguetes?
No lo sé, pero la rana ha vuelto a la vida desde que mi primo la tocó.
Ahora me toca a mí devolverla a su hogar.
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9 comentarios:
Oye GUAPA, que esa ranita de latón tiene dueña y para nada se ha olvidao de ella!!!
La sacaste de su HOGAR, de mi segunda casa. Y ahí espero que regrese.
Cuídala. ES ESPECIAL
jajaja! que rapida tia!!!
Regresará no te preocupes, regresará! Se coló en mi bolso sin yo darme cuenta y mi primo te la ha resucitado...deberías darme las gracias jaja
Yo creo que la resucitaste tu, leire. Porque la supiste ver, te enamoraste -¿sería un principe?, no lo sabemos-, le diste confianza, volvió a creer en la vida y echó a saltar.
Vaya, aquí tenemos otro cuento.
mil gracias, PRINCESA.
jaaa!
y 15 mil gracias a MARIO por resucitarla y cuidarla.
Se va a acabar sonrojando...
no se si conoce la vergüenza ...
Jajajaja. Tienes razón...
Jajajaj!!! ese dialogo entre mis BLOGADICTOS!!!! QUE COJONUDOS!!!
Rotario....JAVI!
Javi....Rotario!
Sabia que te gustaría Ángel González. Estaba seguro.
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