PRECIOSAS PALABRAS TRISTES


"A veces, te enamoras de alguien a quien deseas y desean muchas personas y cuando lo tienes empiezas a pensar si de verdad te enamoraste de él, o de él y del deseo de todas esas personas. Y entonces, por un momento,añoras aquel deseo ajeno que lo convertía en un AMOR PLATÓNICO, IMPOSIBLE, INALCANZABLE y por todo ello PERFECTO"

El texto pertenece al libro de Belen Gopegui que lleva por título "El padre de Blancanieves". Yo lo rescaté del blog de Javi, para archivarlo en el mío con unas pequeñas variaciones personales, el texto original dice asi:

"A veces te enamoras de alguien a quien desean muchas personas y cuando lo tienes para ti empiezas a pensar si de verdad te enamoraste de él, o de él y del deseo de todas esas personas, y, aun a costa de tu tranquilidad, por un momento añoras aquel deseo ajeno. Yo encontré en ti al exaltado, tímido y por tímido más exaltado todavía, amé al exaltado. Pero si permaneces a mi lado empiezo a no quererme, Goyo. Es el precio que tenéis que pagar los exaltados. Nos hacéis sentirnos culpables a los demás. Y tal vez os vais quedando solos"

Preciosas palabras tristes

2 comentarios:

J. dijo...

Aparece en "El padre de Blancanieves" esta poesía que también me recordó...:


FELICES LOS NORMALES

Felices los normales, esos seres extraños,
Los que no tuvieron una madre loca, un padre borracho, un hijo delincuente,
Una casa en ninguna parte, una enfermedad desconocida,
Los que no han sido calcinados por un amor devorante,
Los que vivieron los diecisiete rostros de la sonrisa y un poco más,
Los llenos de zapatos, los arcángeles con sombreros,
Los satisfechos, los gordos, los lindos,
Los rintintín y sus secuaces, los que cómo no, por aquí,
Los que ganan, los que son queridos hasta la empuñadura,
Los flautistas acompañados por ratones,
Los vendedores y sus compradores,
Los caballeros ligeramente sobrehumanos,
Los hombres vestidos de truenos y las mujeres de relámpagos,
Los delicados, los sensatos, los finos,
Los amables, los dulces, los comestibles y los bebestibles.
Felices las aves, el estiércol, las piedras.

Pero que den paso a los que hacen los mundos y los sueños,
Las ilusiones, las sinfonías, las palabras que nos desbaratan
Y nos construyen, los más locos que sus madres, los más borrachos
Que sus padres y más delincuentes que sus hijos
Y más devorados por amores calcinantes.
Que les dejen su sitio en el infierno, y basta.

Besos (casi) perfectos!!!

esther dijo...

Que bonita Javi

Gracias por compartirla.

Leire...te sigo...
en silecio.