"De repente
la brevedad
del letargo
se vuelve
eco de mi propio
yo.
Resuenan
los violines
de tu nombre
en los tímpanos
antárticos
de mi corazón.
La anestesia mental
ya no es suficiente
para amortiguar
el vacío de tu ausencia.
Existes
y sin embargo
no estás.
Cuando
los ojos
de otras caras
te miran
como si fueran
los tuyos,
cuando
todos los labios
se vuelven
tus labios
y todos
los perfumes
huelen a ti,
cuando las voces
que pasean
-solas o acompañadas-
por las calles
de la vieja Iruñea
suenan a esa voz
dulce y sosegada
de labios minúsculos
que apenas vocalizan
las palabras.
Entonces
el vacío
se vuelve inerte
y tu ausencia
me dilata las arterias
hasta envenenar
la atmósfera
de sentimientos
oxidados
por las lágrimas
que tu nostalgia
tejió desde tu partida
en mi interior.
Y me desintegro
como el amor
que un día
descolonizó
nuestros corazones.
Me desinflo
lentamente.
Me marchito,
como la flor
que aquel otoño
planté
sin fortuna
en tu
corazón.
Muerta ella.
Muerta YO"
la brevedad
del letargo
se vuelve
eco de mi propio
yo.
Resuenan
los violines
de tu nombre
en los tímpanos
antárticos
de mi corazón.
La anestesia mental
ya no es suficiente
para amortiguar
el vacío de tu ausencia.
Existes
y sin embargo
no estás.
Cuando
los ojos
de otras caras
te miran
como si fueran
los tuyos,
cuando
todos los labios
se vuelven
tus labios
y todos
los perfumes
huelen a ti,
cuando las voces
que pasean
-solas o acompañadas-
por las calles
de la vieja Iruñea
suenan a esa voz
dulce y sosegada
de labios minúsculos
que apenas vocalizan
las palabras.
Entonces
el vacío
se vuelve inerte
y tu ausencia
me dilata las arterias
hasta envenenar
la atmósfera
de sentimientos
oxidados
por las lágrimas
que tu nostalgia
tejió desde tu partida
en mi interior.
Y me desintegro
como el amor
que un día
descolonizó
nuestros corazones.
Me desinflo
lentamente.
Me marchito,
como la flor
que aquel otoño
planté
sin fortuna
en tu
corazón.
Muerta ella.
Muerta YO"
1 comentario:
hola lokura de vida. Puedo parecerte osado, puede también que no te guste, y no sé si aceptas un par de correcciones a esta preciosa poesía.
Mi particular entendimiento es, si, demasiado particular. No obstante, te lo voy a contar. Hay dos palabritas que yo cambiaría, pueden parecerte tonterís y en ese caso perdona mi atrevimiento pues no pretendo otra cosa que hacer la noche más llevadera (mayúsculas el cambio que yo haría. En tal caso, siempre podrás extinguirme. Los cambios:
1- Cuando
los ojos
de otras caras
ME miran
2-oxidados
por las lágrimas
que LA nostalgia
Un abrazo y enohrabuena por tu arte. Yo sigo leyendo y guardaré silencio
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