ME BASTA ASÍ
Si yo fuera Dios
y tuviese el secreto,
haría
un ser exacto a ti!.
Lo probaría,
con la boca,
y si ese sabor fuese
igual al tuyo,
o sea,
tu mismo olor,
y tu manera de sonreír,
y de guardar silencio,
y de estrechar mi mano estrictamente,
y de besarnos sin hacernos daño,
entonces...
Si yo fuese Dios,
podría repetirte y repetirte,
siempre igual y siempre diferente,
sin cansarme jamás del juego idéntico,
sin desdeñar tampoco lo que fuiste
por lo que ibas a ser dentro de nada;
ya no sé si me explico, pero quiero
aclarar que si yo fuese
Dios,
haría lo posible por ser LEIRE OLCOZ
para quererte tal como te quiero,
para aguardar con calma
a que te crees tú cada día,
a que sorprendas todas las mañanas
la luz recién nacida con tu propia luz,
y corras
la cortina impalpable que separa
el sueño de la vida,
resucitándome con tu palabra.
Alegre,
yo,
mojada todavía
de sombras y pereza,
sorprendida y absorta
en la contemplación de todo aquello
que, en unión de mí misma,
recuperas y salvas, mueves, dejas
abandonado cuando -luego-
callas...
Escucho tu silencio.
Oigo constelaciones: EXISTES!!!
Creo en ti.
Eres.
Me basta.
Para tod@s aquellos que están o alguna vez estuvieron enamorados. Porque el amor es tan libre como cada uno quiere que lo sea. Ahí va esta poesía de ÁNGEL GONZÁLEZ con algún cambio que he creído conveniente, porque os quiero, de diferente manera a cada un@, pero qué más da cómo querer si al final querer es lo que cuenta!
